LA ACEPTACIÓN
Aceptación significa asumir la realidad de la vida tal como es, aceptar las circunstancias que no podemos controlar y adaptarnos a ellas, reduciendo así el sufrimiento que sentimos cuando no aceptamos lo que sucede.
La aceptación no significa resignación. La resignación
implica dolor y queja, mientras que la aceptación asume el proceso de una
situación no deseada, evita la negación, porque lo “es” no se puede cambiar y
negarlo no aporta beneficio alguno. Cuando yo dejo de negar aquello que no
acepto, puedo observarlo y pasar a la acción.
Por ello la aceptación es una herramienta de bienestar, que
podemos implementar en nuestra práctica de Yoga, en nuestra forma de vivir y de
gestionar lo que nos pasa.
Vivir en la aceptación nos ayudará a estar en armonía con
nosotros mismos y con nuestro entorno, aumentar la tolerancia a la frustración,
gestionar nuestras emociones, superar las pérdidas, mejorar la salud mental y
física, y en resumidas cuentas, a ser más felices.
Para desarrollar este concepto de aceptación e incorporarlo
en el día a día, puedes trabajar en los siguientes aspectos: