El neuromarketing es la ciencia de la decisión humana.
Neuromarketing aplicado es utilizar los hallazgos de la neurociencia para
mejorar ventas y marketing.
Las técnicas de neuromarketing analizan los niveles de
emoción, atención y memoria, percibidos consciente o subconscientemente, con el
objetivo de predecir la conducta del consumidor. Se utilizan mediciones
psicofisiológicas, como encefalografía, resonancia magnética funcional,
seguimiento ocular, ritmo cardíaco, respuesta galvánica de la piel, imágenes térmicas,
etc., para conocer el comportamiento del consumidor.
No es mi intención juzgar la labor de los profesionales del
marketing y del más recién llegado neuromarketing, es su trabajo y, teniendo en
cuenta que vivimos en una sociedad de consumo, cada uno de nosotros pone los
límites éticos-morales, dentro de la legalidad, donde lo cree oportuno.
Sin embargo, considero que es valioso estar informados de la
utilización de estas técnicas por parte de las empresas, para decidir si
permitimos que nos manipulen o intentamos tomar decisiones conscientes como
consumidores, sobre todo en lo que afecta a nuestros niños, que también son
consumidores.